La palabra continuo (sin acento) proviene del latín contin?us. En física, una función, variable o sistema es continuo, en contraposición a discreto, si entre dos puntos cualesquiera existe una infinidad de puntos y si, además, tiene la propiedad de completitud; es decir, si la distancia entre los dos puntos tomados mide, para cada número entre 0 y podemos encontrar un punto cuya distancia del primero mida exactamente a ese número. Es el caso, por ejemplo, de los números reales, así como el espacio-tiempo, según la relatividad.