En vías férreas, las traviesas o durmientes son el elemento transversal al eje de la vía que sirve para mantener unidos y a la vez a una distancia fija a los dos carriles que conforman la vía, así como mantenerlos unidos al balasto, trasmitiendo el peso del material rodante al balasto y, por intermedio de éste, al suelo. También cumplen la función de dar peso al conjunto, de manera que la geometría inicial del trazado se mantenga en la mayor medida posible. Se fabrican de diversos materiales, entre ellos madera, hierro y hormigón.